Foley & Lardner informa a los proveedores automovilísticos mexicanos sobre los avances en materia de vehículos eléctricos en EE. UU.

Los abogados de Foley & Lardner tuvieron el honor esta semana de presentar una actualización sobre los avances en materia de vehículos eléctricos en Estados Unidos a los miembros de la Industria Nacionalde Autopartes (INA) de México. El director general dela INA, Alberto Bustamante, actuó como anfitrión de una mesa redonda moderada por Alejandro Gómez, socio de la oficina de Foley en Ciudad de México y miembro del equipo automovilístico de Foley.

Chris Grigorian, socio de la oficina de Foley en Washington D. C., inició el debate con una descripción general del marco normativo básico de los Estados Unidos, administrado por la Administración Nacional de Seguridad Vial en Carreteras (NHTSA). Chris repasó las diversas formas en que la NHTSA ejerce su autoridad, entre ellas el desarrollo y la aplicación de normas de seguridad, la realización de investigaciones sobre defectos, la gestión de retiradas del mercado y la realización de investigaciones sobre la seguridad de los vehículos. A continuación, pasó a examinar la Norma Federal de Seguridad de Vehículos Motorizados (FMVSS) 305, que regula las baterías y los derrames de electrolitos. Chris señaló que la NHTSA está trabajando en una propuesta de enmienda a la FMVSS 305, que se espera que se publique pronto para que el público pueda presentar sus comentarios. Se prevé que las enmiendas abarquen de forma más exhaustiva las baterías y otros aspectos de los vehículos eléctricos que la normativa actual. Chris también repasó algunas de las actividades de investigación relacionadas con los vehículos eléctricos que se están llevando a cabo actualmente en la NHTSA. Por último, Chris señaló el papel que desempeñan la EPA y la Junta de Recursos del Aire de California en la regulación de los vehículos eléctricos.

Steve Hilfinger, socio de la oficina de Foley en Detroit, dirigió a continuación un análisis de los distintos programas federales, estatales y locales de EE. UU., así como de los créditos fiscales y los incentivos que están impulsando el desarrollo, la producción y la venta de vehículos eléctricos, baterías, cargadores de vehículos eléctricos y otros equipos de energía limpia. Esto incluyó un análisis del programa NEVI, dotado con 7500 millones de dólares, en el marco de la Ley de Infraestructuras Bipartidista, las oportunidades que ofrece la Ley de Reducción de la Inflación de 2022 (IRA) y el cumplimiento de las disposiciones relacionadas con «Buy America», la Ley de Chips y la miríada de incentivos estatales y locales para el desarrollo de vehículos eléctricos. Esto incluyó los importantes incentivos que se conceden a las fábricas de baterías, como la recientemente anunciada/planificada fábrica de baterías de Ford, de 3500 millones de dólares, cerca de Marshall, Míchigan. Existen oportunidades para llevar el montaje final y el abastecimiento a los Estados Unidos, para cumplir con los diversos requisitos de la IRA y para aprovechar las oportunidades de mercado previstas en los Estados Unidos.

Jon Gabriel, socio de la oficina de Foley en Boston, analizó las estrategias que están empleando las empresas para utilizar fusiones y adquisiciones, empresas conjuntas y otras actividades de inversión con el fin de acelerar el desarrollo de tecnologías para vehículos eléctricos. Entre ellas se incluyen inversiones de capital riesgo en tecnologías en fase inicial, que suelen ir acompañadas de un acuerdo de desarrollo conjunto (JDA), algunas consideraciones de estructuración para acuerdos de empresas conjuntas (JVA) y una serie de cuestiones de diligencia debida y estructuración aplicables a las operaciones de fusiones y adquisiciones en el ámbito de los vehículos eléctricos. Jon señaló que cada una de estas técnicas puede considerarse una vía alternativa o un complemento a las inversiones de capital autofinanciadas, que suelen ser sustanciales en el ámbito de los vehículos eléctricos.

Nicholas Ellis, socio de la oficina de Foley en Detroit, concluyó el panel analizando las diversas oportunidades y retos que la transición de los motores de combustión interna a los vehículos eléctricos presenta para los proveedores en la cadena de suministro. Entre ellos se incluyen las ventajas y los riesgos asociados al manejo de nuevas tecnologías, nuevas empresas en el sector y nuevas relaciones que deben forjarse ante la gran incertidumbre y los riesgos existentes. Nicholas animó a los proveedores de automoción presentes a evaluar sus estrategias de vehículos eléctricos y las cuestiones relacionadas con la cadena de suministro lo antes posible, con el fin de gestionar de la mejor manera posible la transición a los vehículos eléctricos o informar a las empresas sobre las alternativas que pueden adoptar (incluida la venta, si ello es coherente con las perspectivas y la estrategia de la empresa).

La sesión concluyó con una ronda de preguntas y respuestas, que reveló el gran interés de los proveedores mexicanos en la migración a los vehículos eléctricos, que se está liderando en Estados Unidos y otros lugares, pero que tendrá un impacto significativo en la industria automotriz mexicana.

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