Chicago adopta la baja remunerada por enfermedad siguiendo la creciente tendencia nacional
A finales del mes pasado, el Ayuntamiento de Chicago aprobó por unanimidad una nuevaordenanza sobre bajas remuneradas por enfermedad que obliga a prácticamente todos los empleadores de la ciudad a conceder al menos algunos días libres remunerados a sus empleados por motivos de enfermedad. Se espera que la Junta de Comisionados del Condado de Cook apruebe una ordenanza similar a finales de este año. Chicago no está marcando ninguna tendencia con esta medida, sino que se trata solo del último ejemplo de una tendencia nacional que obliga a los empleadores a proporcionar a sus empleados tiempo libre remunerado para que puedan cuidar de sí mismos o de sus familias, una tendencia que sin duda continuará y se ampliará.
Aunque actualmente existe un mosaico de normas y reglamentos sobre las bajas remuneradas por enfermedad en todo el país, la ordenanza de Chicago es un buen ejemplo de los requisitos similares que existen en otros estados y municipios. La ordenanza, que entrará en vigor el 1 de julio de 2017, se aplica a cualquier empleado con sede o que trabaje dentro de los límites de la ciudad de Chicago y que trabaje 80 horas o más en un periodo de 120 días, es decir, básicamente cualquier persona que cobre un sueldo de forma regular. Los empleadores deben proporcionar a estos trabajadores el derecho a acumular y utilizar hasta cinco días de baja remunerada por enfermedad (o 40 horas) al año, que se ganan a razón de una hora por cada 40 horas trabajadas como mínimo.
Además, se debe permitir a los trabajadores transferir hasta dos días y medio (20 horas) de licencia por enfermedad no utilizada al año siguiente, pero los empleadores pueden limitar la acumulación total a 40 horas, si así lo desean. La acumulación de días de baja por enfermedad remunerados debe comenzar el primer día de trabajo del empleado (o el 1 de julio de 2017, en el caso de los empleados actuales, lo que sea posterior), y los requisitos de acumulación y uso se miden a partir de esa fecha. Sin embargo, los empleadores pueden restringir el uso de los días de baja por enfermedad remunerados por parte de los nuevos empleados hasta que hayan completado seis meses completos de empleo continuo.
Es importante destacar que la ordenanza de Chicago no exige que los empleadores creen un plan de licencia por enfermedad remunerada independiente si ya cuentan con una política general de tiempo libre remunerado (PTO) indiferenciada que cumple o supera las tasas de acumulación requeridas. Por ejemplo, si un empleador mantiene una política de PTO que proporciona una acumulación de PTO a una tasa de dos horas por cada 40 horas trabajadas, con un límite máximo de 15 días de PTO, entonces la política de PTO supera los requisitos. Sin embargo, si la PTO se acumula a una tasa inferior a una hora por cada 40 horas trabajadas, será necesario revisar la política para cumplir los requisitos mínimos.
Los empleados pueden utilizar la baja por enfermedad para cuidar de sí mismos o de sus familiares cuando están enfermos, para recibir atención médica, incluyendo tratamiento, diagnóstico o atención preventiva, y si el empleado o un familiar es víctima de violencia doméstica o abuso sexual. Los empleadores también deben dar a los empleados la posibilidad de utilizar su tiempo de baja por enfermedad acumulado si el empleador, o las escuelas de los hijos del empleado, cierran debido a una emergencia de salud pública.
Existen matices adicionales en la ley, algunos de los cuales varían en función de la plantilla concreta, como la interacción con la Ley de Licencia Familiar y Médica (FMLA), el cálculo de la prestación por enfermedad para los trabajadores que reciben propinas y la exención de los requisitos de baja por enfermedad en un convenio colectivo. Además, al igual que los empleadores con políticas de PTO querrán asegurarse de que las suyas están a la altura de estas nuevas normas, los empleadores sin una política de PTO tal vez quieran considerar la posibilidad de adoptar una para simplificar la administración de las prestaciones por tiempo libre. Como resultado de estas y otras cuestiones y tendencias en todo el país, los empleadores deben consultar con un abogado para asegurarse de que cumplen o superan los requisitos mínimos de baja por enfermedad en sus lugares de trabajo.
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