Christopher Swift analiza la cooperación de las agencias estadounidenses en relación con las restricciones rusas
Christopher Swift, socio de Foley & Lardner LLP, es citado en el artículo del Anti-Corruption Report titulado«Nuevas restricciones a Rusia: cooperación entre agencias y enfoque en la industria», en el que ofrece su opinión sobre las nuevas restricciones impuestas por Estados Unidos a cientos de entidades asociadas con Rusia.
«El refuerzo sustancial de la cooperación entre organismos en los últimos años es normal y necesario», razonó Swift.
Los controles a la exportación, como los que aplica la Oficina de Industria y Seguridad (BIS), constituyen una herramienta más ambiciosa que las sanciones en algunos aspectos, afirmó Swift. «Las sanciones económicas implican limitaciones a la hora de tratar con determinadas personas o lugares. Los controles de exportación son limitaciones al uso de determinadas cosas, incluidos productos, tecnología y código fuente», explicó. Sancionar a Rusia no impide automáticamente que ciertas cosas lleguen a sus manos, pero los controles de exportación aplicados por la BIS pueden cortar las cadenas de suministro de una manera más sofisticada, según Swift. «Su jurisdicción se aplica a los productos y la tecnología, no solo a las partes y los países», añadió.
Swift destacó que los fabricantes de componentes electrónicos, semiconductores y artículos tecnológicos como acelerómetros, que pueden acabar incorporándose a drones suministrados a Rusia, se encuentran entre los productos occidentales afectados por las medidas.
«Las sanciones occidentales han aislado al régimen de las finanzas y los suministros procedentes de Norteamérica y Europa Occidental. Pero si eres una empresa estadounidense, no basta con fijarse solo en Rusia. Fíjate en los países a los que vendes, aquellos en los que Rusia ha reforzado sus relaciones, especialmente China, pero también India», aconsejó Swift.
(Suscripción obligatoria)