Mirando hacia atrás y hacia adelante: ¿Dónde nos encontramos en el capital riesgo a mediados de 2025?
Ahora que hemos superado el ecuador de 2025, es el momento oportuno para echar la vista atrás y repasar lo que hemos visto en la primera mitad del año, así como para reevaluar el camino que nos queda por delante. ¿Acertamos con nuestras predicciones de principios de año o nos equivocamos? ¿Qué pensamos ahora?
En resumen, nos equivocamos por completo. Decir que la primera mitad del año estuvo marcada por una volatilidad masiva y una incertidumbre sin precedentes sería quedarse corto, o peor aún, sería una aparición estelar del «Capitán Obvio». La inversión de capital riesgo comenzó de forma eufórica y luego se vio sorprendida por una ráfaga de órdenes presidenciales, oleadas de aranceles no vistas en un siglo, una guerra activa, una Guerra Fría intensificada y una agitación social. Todo ello se vio coronado por un gran y «bonito» proyecto de ley para prorrogar de forma permanente ciertos recortes fiscales, introducir otros nuevos recortes fiscales temporales y cristalizar las prioridades presupuestarias de la nueva administración.
Al comenzar el verano, nos encontramos en un nuevo paradigma y apenas estamos empezando a comprender lo que significa.
Con ese fin, PitchBook ha publicado una actualización semestral de su informe «2025 US Venture Capital Outlook» (Perspectivas del capital riesgo en EE. UU. para 2025), en la que revisa sus predicciones y analiza los cambios que se han producido este año.
A principios de 2025, los analistas de PitchBook esperaban un repunte de la liquidez con un mercado público fuerte y muchas empresas a la espera de salir a bolsa. Luego llegaron los aranceles, que han tenido un gran impacto en el sector del capital riesgo, lo que ha provocado «agitación en el mercado de las OPI». PitchBook afirma ahora que «parece poco probable que se vuelva a un entorno de liquidez normal en 2025». Prevén que el mercado de las OPI seguirá siendo más lento a medida que avance el año.
Dicho esto, este año hemos visto algunas salidas a bolsa con un éxito fenomenal, aunque no tantas como se esperaba. Señalan ocho cotizaciones exitosas en las que las valoraciones superaron los 1000 millones de dólares. Entre ellas se encuentra Circle, que tuvo una salida a bolsa espectacular en junio y cuyas acciones se han disparado casi un 500 % desde el precio de salida. Las acciones de Circle se duplicaron con creces en su primer día de cotización y han seguido una trayectoria ascendente desde entonces. CoreWeave y Chime también se encuentran entre las empresas con salidas a bolsa más exitosas de este año. Así pues, aunque no hemos visto el repunte de las salidas a bolsa que se había pronosticado, seguimos viendo surgir casos de éxito.
También se han producido algunos cambios en las tendencias de fusiones y adquisiciones, y las empresas respaldadas por capital riesgo se han convertido en «compradores importantes en el mercado». PitchBook señala que este es especialmente el caso de las startups de IA bien financiadas. Sus datos muestran que el 36 % de las transacciones de fusiones y adquisiciones realizadas en lo que va de año han incluido a una empresa respaldada por capital riesgo como compradora. Curiosamente, incluso con la incertidumbre de 2025, se han cerrado 372 transacciones en lo que va de año, y predicen que, si se mantiene esta tendencia, este año superará por poco las cifras de 2024. Probablemente, esto se deba a adquisiciones de menor envergadura, ya que aún estamos a la espera de los cambios normativos que impulsarían transacciones de mayor envergadura.
Los analistas de PitchBook también esperaban que el mercado secundario desempeñara un papel más importante en el capital riesgo este año, y a los seis meses, esa perspectiva se está cumpliendo según lo previsto. El mercado secundario ha continuado su expansión, y su estimación actual del mercado secundario directo de capital riesgo en Estados Unidos oscila entre 48 100 y 75 000 millones de dólares. Esta cifra es significativamente superior a su estimación para 2024. Consideran que, a medida que avancemos, es muy probable que el crecimiento de los mercados secundarios continúe, y prevén una «mayor maduración del mercado secundario de capital riesgo», ya que los inversores buscan liquidez en lugar de una salida a bolsa o una adquisición.
En términos de recaudación de fondos, muchos predijeron que la actividad en 2025 superaría los niveles que vimos en 2024. En lo que va de año, la actividad de recaudación de fondos se ha mantenido moderada, con datos que muestran que solo se han recaudado 23 000 millones de dólares en lo que va de año. La proyección original era de 90 000 millones de dólares para el año, por lo que se está situando muy por debajo de ese nivel. Y si se excluyen algunas megainversiones en IA de los grandes hiperescaladores, la cifra es aún más moderada.
En última instancia, aunque 2025 se ha desviado de las expectativas iniciales, no nos encontramos en un punto muerto. A medida que los inversores recalibran sus estrategias y los fundadores se enfrentan a condiciones cambiantes, el resto del año pondrá a prueba la agilidad y la visión a largo plazo. Todavía existen oportunidades para aquellos que estén en condiciones de aprovecharlas.
Una última nota: por lo que vemos y oímos anecdóticamente sobre el terreno en Silicon Valley, hay una larga lista de empresas tecnológicas exitosas y en crecimiento que se están preparando para salir al mercado tan pronto como se abra la ventana. Esperemos que la segunda mitad sea mejor que la primera.